GURDJIEFF - ARGENTINA
 
 
 

Discriminación 25/02/90

Esto es algo que todavía no tiene forma, pero que tal vez valdría la pena tocarlo y que no está en los libros tan específicamente dicho, y es muy importante y hace falta en cada uno que se encuentra en un Trabajo: la Discriminación.

Se usa en la vida, discriminamos entre té y café, entre rosa y jazmín, pero no me refiero a este tipo de discriminación, eso es lo de más bajo nivel , donde uno habitualmente se orienta. Discriminación en el sentido eseral; es muy difícil de comprender que uno pueda tener una discriminación desde el interior. Lo que nos puede ayudar acá es en realidad algo de los hindues que tienen la palabra “Viveka”, discriminación. Viveka dicen que esta discriminación es algo como una joya principal de una diadema, que los reyes, maharaes o maharinis cuando se han puesto sus diademas, tenían en ellas una joya principal, un gran diamante y es como el diamante que corta, la discriminación: viveka chuda mani.

Chuda es Chit (en griego Squiso, separar). Lo conocemos como en esquizofrenia, y corta como un diamante, como una joya, mani.

¿Y qué es esto? ¿Cómo necesitamos esto en el Trabajo? Por ejemplo, discriminar lo real de lo imaginario y sobre esto los japoneses tienen koans, que Uds. todos conocen del budismo zen, pero hay algunos que son muy pocos conocidos que están para altos estudios, que se llaman los koans goi, que tratan de la discriminación de lo aparente y lo real, porque vivimos en un mundo donde no discriminamos realmente que es real y qué es aparente. La verdadera discriminación sería para ellos cuando uno puede ver lo aparente en lo real y lo real en lo aparente, pero esto pertenece a altos estudios.

En el Trabajo: discriminar influencias. El Trabajo nos habla de influencias A, B y C y para nosotros lo más importante es discriminar entre influencias A y B, a sabiendas que en el fondo hay influencias que vienen de influencias más altas o más interior todavía. Influencias que se crean en la vida, A y B que son influencias que no son creadas en la vida, sino que son ya influencias C, que se han puesto después en un nivel B. ¿Qué significa esto? Son letras nada más, pero vemos que hay una terrible mescolanza en el Trabajo, una mescolanza terrible, una discracia en realidad de lo que son estas influencias. En el Trabajo tenemos un amigo, un hermano o una hermana, gente que he llevado al Trabajo, y digo también es bueno para ellos y no me he preguntado si realmente esta persona tiene sed, una verdadera necesidad, una sed para ser distintos, una sed para encontrar otras influencias.

Influencias B son creadas también o manifiestas a través del arte, de la ciencia, de la filosofía y de la religión. Estas cuatro representan según Aba Dorotea, como han leído tal vez en Un nuevo modelo del Universo, las cuatro casi diríamos son puertas, a través de las cuales pueden entrar en influencias B. pero aquí está todo mezclado, la ciencia popular, la filosofía académica o no académica, queda todo nivelado y que filósofos como Heraclito o Pitagoras, figuren históricamente como filósofos, y no se dan cuentan que tienen una enorme diferencia en el nivel del Ser con todo el resto de los filósofos académicos de hoy incluyendo Platón, Sócrates, etc.

Nivel de Ser. No discriminamos normalmente el nivel de Ser. Por ejemplo, en la ciencia, en la filosofía, en el arte; si un artista es famoso y hace una obra con mañas especiales, como tipo Dalí, entonces se toma como un artista excepcional, y no se toma en cuenta el nivel de ser. No solamente en las artes, sino también en la filosofía como en la religión. Por ejemplo, en la religión, (me llama mucho la atención que él, para Uds. tal vez es Santo Papa) que Dios ha vencido en el Este para derribar al comunismo. Puede ser un hombre especial, con muchas lenguas, pero qué nivel tiene, toma como que Dios ha derribado al comunismo. Vixit, el ha vencido para derribar los dictadores de Rumania, de Rusia, eso ya es una religión del hombre número 1, 2 y 3, pero es el Papa el que lo dijo!

Esa discriminación por el nivel de Ser, es algo muy importante. Todavía en el Trabajo, donde se forman relaciones, ciertas amistades por la personalidad, mas que todo y muy poco por nivel de ser, porque no discrimino el nivel de ser. Entonces podríamos hablar de una discriminación eseral. Esta discriminación necesita algo, necesita una cooperación con la intuición. La verdadera discriminación está conectada con esta intuición debido a la torsión. Entonces esta intuición del centro instintivo es una forma directa de ver las cosas y por ejemplo, en toda la práctica de la observación de sí mismo, a pesar de todo, estamos todavía en pañales, ¿por qué? Porque observamos con la mente y no vemos con discriminación lo que se presenta. Lo interpretamos, lo criticamos, lo analizamos. Y esta intuición que ve, tiene algo que está dicho en Fragmentos, que se conoce por el sabor interior, discriminamos por el sabor interior. Pero en realidad discriminamos por la mente: eso es eso, eso es bueno, eso es malo, entonces nos movemos en aguas chatas; en aguas chatas no se puede nadar, sino solamente “chapalear”. No podemos observar realmente, objetivamente, por eso es tan difícil, porque como dice Gurdjieff en Perspectivas, “ es una función del Amo”. Discriminar por el sabor interior. Hoy día la discriminación ha degenerado porque es muy difícil discriminar entre lo auténtico y lo falso. Los pollos inyectados con hormonas, los panes y helados con mejoradores, y los vinos adulterados, etc. Por todos lados tenemos lo falso, lo “no-genuino”, y se pierde mucho el sabor de lo auténtico. Nuestro centro instintivo en ese sentido también fisicamente tiene una discriminación hoy día muy limitada de lo que es auténtico de lo que no es.

Así es también en el mundo de los otros centros. El mundo de la mente, ¿discrimino realmente cuando un pensamiento es dañino o no , o lo dejo pasar, permito que se expanda por todo el organismo y tenga su efecto somático? Yo no discrimino, porque los pensamientos vienen en fardos de asociaciones. Estoy expuesto a las asociaciones, y muy pocas veces hay una conciencia que acompaña a esto, una presencia que sabe discriminar, que puede sentir que estos pensamientos no son míos y no los voy a aceptar. Según la regla de San Agustín, el pensamiento todavía no es pecado, sino cuando comienzo a pensar con el pensamiento, puedo pensar el pecado. Cuando ya tengo un pensamiento lascivo o negativo o violento, o que quiero matar a alguien, entonces ya es pecado, es malo, todavía no, es un pensamiento que vino que tiene sus raíces en algo que ni conozco. Pero cuando comienzo a manejar este pensamiento, eso necesita una discriminación. Este pensamiento pertenece a una categoría u otra. Discriminar entre los centros mismos. Tomo mis emociones como auténticas, especialmente si están conectadas con un poquito de lágrimas y de una onda que se hincha; eufórico, deprimido, pero todavía no discrimino y veo que realmente eso es solamente un movimiento en la prakriti, en esta naturaleza en la cual estoy, que una cosa no es realmente mi emoción. Mi emoción todavía es más profunda, mi emoción tiene una valoración, porque la característica de la emoción es la valoración, y estas emociones no tienen normalmente valorización, distorsionan hacia lo negativo, hacia lo positivo, pero no tienen una valorización. Eso a todos nos hace falta, por ej. – es un tema gigantesco que no puedo tocar aquí-, el dicho de Gurdjieff: “revaluar los valores”. ¿Y quién el Trabajo ha revaluado con discriminación sus valores? Todavía mantenemos muchos sus “des-valores”, que toma como valores.

La discriminación se acompaña por todas partes, hasta en mis actitudes, porque yo tengo actitudes de vida, ¡y podría tener actitudes de Trabajo! ¡y debería tener! Las actitudes de vida son como muros, y las actitudes de Trabajo son como ventanas. Mis actitudes son casi todas muy ….. tomadas así y no tienen trascendencia, no tienen la Trascendencia, lo translúcido del vidrio de una ventana. Aquíe es donde la discriminación puede y debe entrar.¿Cuáles de mis actitudes son de Trabajo y cuáles no? No me refiero a las actitudes de los moralistas en el Trabajo, de los mejoristas, sino a las actitudes que corresponden a los principios y leyes del Trabajo, tanto al Método como a la Enseñanza. No solamente de esta Enseñanza, también pueden ser de otra Enseñanza auténtic a. Cuando uno ve puede ya discriminar, por ej. entre actitudes de Trabajo auténticas, y actitudes falsas, imitadas, porque mucha gente va al Trabajo, a las reuniones con una actitud asumida no realmente del Trabajo, pero entran así hasta caen con toda su densidad todavía, y al cruzar la puerta, toman una actitud esotérica, de apariencia, y es una mentira en realidad. La actitud del Trabajo siempre debe ser algo más auténtico, conectado con algo humilde y no exagerado, y no sólo apariencia. Entonces la discriminación por el sabor interior puede guiarnos. Si veo la actitud en otros, sin criticar,sin juzgar, pero por el sabor, me doy cuenta que eso no es auténtico, es falso, y si lo puedo aplicar a mí mismo, mejor todavía.

En cuanto a la Enseñanza, la discriminación es en realidad, la valiosa medida, para los niveles en el Trabajo, tanto nivel de ser, como en cuanto a los niveles de las vibraciones. Todos han estudiado la Tabla de Hidrógenos, pero ¿quién está seguro que puede realmente saber en qué hidrógeno estoy vibrando? Por el sabor interior –discriminar en qué peldaño de la escalera hacia arriba estoy vibrando-. La salsa es algo bastante grueso y la mente tiene su límite, a pesar que soy ambicioso y me engaño, el sabor interior me puede decir, eso es eseral, eso es mi ser que sabe esto: alli hay una orientación por niveles. En la vida ya todo está nivelado, y la orientación es más por el status, por los títulos, por la fama,por el poder político, por el dinero,los bienes, etc. Esa no es una jerarquía de valores según el ser, sino según cosas completamente exteriores, materiales.

Pero hay esta idea de establecer una jerarquía del ser y dejar de nivelar todo. Por ej. una cosa práctica: todo el mundo tiene familia y trabajo, etc. En mi familia muchos no están en el Trabajo, pero frente a esto mi mujer o mi esposo que no están en el Trabajo o mis padres o madres, los trato nivelando todo como si estuvieran en el Trabajo, los tomo igual como a mí mismo, entonces no mantengo la diferencia de nivel, porque estoy emocionalmente ligado y materialmente ligado y es una entropía familiar del Trabajo. Es comprensible, porque quiero compartir, pero ciertas cosas no se pueden compartir, ciertas cosas pertenecen al Trabajo, a un nivel, y otras a otro nivel. No sé si tiene que ver con esto el famoso dicho de Cristo: “he traído no la paz, sino la espada”,en otro Evangelio dice la guerra “y puesto el padre contra el hijo, la hija contra la madre, etc.” Es decir que de esta espada, una espada de discriminación, para no nivelarse completamente al nivel familiar. Porque en el nivel familiar es natural que uno acepte actitudes de la vida, actitudes de “chinela”. Todo esto puede ser muy agradable, muy familiar, incluyendo en el Trabajo, se puede hablar de una gran familia, pero si quiero desarrollarme realmente, no en la fantasía, porque todo nuestro desarrollo está todavía en gran parte en la fantasía, en el querer, en la cual me atribuyo ya niveles que no son míos. Gran peligro de los instructores… porque es muy difícil ver hasta que punto podemos llegar a hablar al grupo como instructores de otro nivel, porque según la regla, un instructor tiene discriminación, porque para tener esta discriminación, debemos preguntarnos ¿quién soy en este momento? ¿en qué nivel estoy? ¿Dónde estoy en este nivel? Esta discriminación es algo que necesitamos, en realidad, como una constante que acompañe nuestro método de observación de sí, de recuerdo de sí, y nuestro método también de investigarse y llegar por fin a conclusiones de conocimiento sobre mí mismo. El observarse es la parte básica, que esta discriminación realmente para ver, está muy ausente, porque me enredo con el evento, entonces el resultado es que entramos en un anecdotismo, humoradas, tragicomedias de la vida,y muy poco en la discriminación. Por ej. : observo este centro que reacciona así, otro centro, así, otro centro…. Es decir, veo las cosas de los centros y estoy arrastrado por los eventos, y comienza a contar la historia, anécdotas, etc. Eso en realidad no es del nivel del Trabajo, sino es el nivel de los grupos de Terapia, alcoholicos anónimos, etc. Esa es la obligación de los instructores de amonestar, con el peligro de hacerse “persona non grata”, que la gente llegue de los eventos exteriores a los eventos interiores.Hay que mirar lo interior realmente como de lo interior y no como de lo exterior.La observación de sí puede llegar a discriminar: esto es esto, sin moral y sin juicio, y sin la enfermedad de bueno y malo, y así en el recuerdo de sí, que debería acompañar la profundización de las observaciones. Es necesario también una gran discriminación, porque la mayoría tiene este gran problema, a pesar de que tiene muchos años en el Trabajo, pero esto no lo protege. Uno piensa que está recordándose, pero no se recuerda de sí mismo, es la gran trampa para los miles y miles que leen los libros y no están en un Trabajo auténtico, hacen cursos por aquí y por allá, y todos caen en esta trampa, pensar que se lo atribuyen, porque les falta discriminación. Se dicen estamos en una escuela, estamos moviéndonos, pero eso es sueño. Ouspensky dijo una vez, que “el sueño puede acompañarnos hasta en los centros superiores”, justamente por falta de discriminación. Si hay discriminación no hay tal peligro; sino hay discriminación, me imagino siempre que estoy en el hidrógeno 12, que me recuerdo de mí, y trae un carbono muy algo al lugar 12, que ya tengo un cuerpo astral, que a veces esta un poquito con titilaciones, pero….todo esto es “imaginaciones”. Y ahí falta la discriminación que corta como un diamante, en forma inexorable, y dice eso no es, eso no es, eso es, esto es, no es aquello. Cuando vemos realmente lo que es la discriminación al investigarnos, es en realidad como un seguro que miento sobre las cosas, porque cuando veo algo que no me gusta, en la auto-investigación de mí mismo, tan importante, el Atma-vichara, se ponen en funcionamiento topes y digo ¡no es por tanto! Y funciona más que todo el gran autotranquilizador, lo justifica, lo embellece, le quita importancia, lo pone fuera de lugar, pero la discriminación dice: -No-¡Esto es así! ¡yo lo veo! ¡yo lo vi!- ¡Yo lo he visto! Entonces un hombre que tiene esta discriminación no solamente ve, sino es visto también. Nosotros vivimos con la gran ilusión que nunca somos visto. Pero al otro lado existe en la Tradición religiosa, esotérica, mística, la idea del Juicio Final, donde se abre el Libro de la Vida. Este Juicio Final es como lo describen los tibetanos, la propia conciencia, la propia memoria de la vida que ve la vida y eso es como un juicio, porque la entidad que no tiene cuerpo, después de la muerte, se siente vista inexorablemente, según esta discriminación, porque todo esto que han inculcado del infierno y sus terribles castigos, es cuestionable, porque en realidad es el propio juicio. Si yo soy visto desde arriba en mí mismo, como esto está en otro tiempo y muy condensado, tiene un efecto de densificación muy grande casi como un agujero negro. Eso es el gran sufrimiento, por el propio juicio, que necesita la discriminación. Si esta falsificado este juicio no puede tener lugar, en este Juicio final no puede ser purificada el alma. Por eso el juicio a la vez es una gran purificación a la cual no nos hemos sometido en la vida. Bueno, es música de futuro…

La discriminación es como una constante que abarca todo el Trabajo. Traten de guardar en su memoria la palabra discriminación no en el sentido mecánico, sino ponderándola y tomada como algo real que tiene una posibilidad de cortar como el diamante, que es todavía lo más duro en la escala de Moss, y aquí puede ayudar lo que llamamos sufrimiento voluntario, labor consciente y sufrimiento voluntario, aunque tal vez mejor que voluntario, es la palabra sufrimiento intencional.

Que la discriminación me ayude a no escapar al sufrimiento intencional. Es algo duro, algo inexorable; algunos han declarado que quieren ser guerreros: - ¡por supuesto!-Solamente con la discriminación uno puede volverse guerrero, con algo inexorable, que corta lo auténtico de lo falso, que mantiene los niveles. Eso es en contra de nuestra época, porque todo quiere ser nivelado, pero interiormente puedo establecer una escala de niveles.


 
Informes y entrevistas al teléfono: (11) 4545-1065 - E-mail: arca1990hoy@yahoo.com.ar